En febrero de 1926, la casa «Veuve de Philippe Hüther», comerciante y fabricante de relojes, registra la marca «The Tudor» establecida en Ginebra en nombre del fundador de Rolex, Hans Wilsdorf. Más tarde, en 1936, la casa transfiere la marca a Wilsdorf. Recién terminada la Segunda Guerra Mundial, Hans Wilsdorf supo que había llegado el momento de expandirse y dotar a la marca de una identidad propia. El 6 de marzo de 1946, creó «Montres TUDOR S.A.», especializada en modelos tanto para hombre como para mujer. Rolex garantizaría las características técnicas, estéticas y funcionales, además de la distribución y el servicio postventa.